¿ALQUIMIA?

Quizás me doy cuenta que soy un ápice de lo que puedo ser y de lo que aún no se que deseo ser.

El día a iluminado con tal fuerza mis días que no he podido entrar en las noches de mi alma, quizás los razonamientos profundos centellean en mi vida tratando de hacerme reaccionar ante la vida, o quizás la noche de mi interior esta dando paso a un nuevo amanecer en mi existencia.

He observado a lo lejos las transformaciones de mi alma, mi mente y mi cotidianidad, lo he hecho finalmente orgullosa de no estar anquilosada en los convencionalismos sociales, sin embargo, esta nueva dimensión de mi vida me asusta un poco, su grandeza hace temblar mis rodillas, mi cuerpo se relaja sin sentido...y el sin sentido me atemoriza...he vivido tanto tiempo programando cada escalón que, al ver tantos en el horizonte me llevan a un cuestionamiento interior que hacen compleja la toma de decisiones que con certeza estoy dispuesta asumir.

Es paradójico, hay tanta certeza en el camino a seguir que cada poro de mi cuerpo se estremece ante una realidad que desconozco pero que se que esta hecha para mi. ¿Hasta qué punto en el infinito va el conocimiento de mi esencia? ¿hasta qué punto en el infinito va la aceptación de mi alma? ¿hasta qué punto en el infinito va mi seguridad en que caminaré lo suficiente sin desistir en algún instante....?

Cada día que pasa observo la madurez de mi ser materializarse a través de las experiencias vividas, cada gran lección ha sido asimilada, ha sido asumida, es el resultado lo que dibuja una sonrisa en mi rostro...pero...¿y si me búsqueda de la flexibilidad de pensamiento fracasara? ¿estaré preparada para desistir? no creo, estoy tan firme en mi deseo, que algunos temores los veo como piedras del rio, aquellas que sólo debes mover para seguir. 

Hay un fuerte hemisferio que tiene la fuerza del sol dentro de esta transformación  y a su vez, la luz de la luna mengua mi fe. Puede ser el cansancio aquel que llega de los nuevos retos y cambios de paradigmas, puede ser, que la soledad toca de nuevo las puertas de  mi sensibilidad y esta no deja ver el camino tan claro y sencillo que viene pronto.

Hay algo cierto, mi ser hoy no desea una noche estrellada, sólo una inmersión en una dimensión llena de silencio.